Por su vasta superficie (32 ha), el Castillo de San Fernando es la fortaleza del siglo XVIII más grande de Europa. Fue escenario de acontecimientos históricos relevantes y cuenta con la aplicación de sofisticadas técnicas constructivas de la época.
Obra del ingeniero Juan Martín Zermeño, construido entre 1753 y 1808, el Castillo de San Fernando fue escenario de acontecimientos históricos: entre otros, la muerte del general Álvarez de Castro o la última reunión del gobierno republicano. Con una superficie de 32 hectáreas, es la mayor fortaleza de Europa del siglo XVIII. Sus cisternas subterráneas de grandes dimensiones pueden visitarse gracias a la visita guiada “La Catedral del Agua”.
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